Iñaki Mendieta con J.J. Benítez.
No es fácil hallar un kui entre los curas. Para ser kui, entre otras virtudes, hay que tener confianza en Dios (no he dicho fe en Dios, que es cosa bien distinta).
Iñaki Mendieta fue uno de los pocos sacerdotes católicos que se ganó el título de kui, y a pulso.
En marzo de 1976 contempló una formación OVNI sobre Opacua, en Álava (España). Entre treinta y cuarenta naves. Y tuvo el coraje suficiente para declararlo públicamente. Fue grafólogo, y desveló más de un secreto sobre Lucía, la vidente de Fátima. Fue un cura detective, que es el no va más entre los curas. Fue el primer cura que dotó de alarma a una iglesia, en Santa Ana (Areta). Cuando entraba un ladrón sonaban las campanas y el pueblo acudía. Y cayeron algunos chorizos, que pretendían robar al que nunca tuvo. Pero, sobre todo, Mendieta fue un hombre con las puertas abiertas. Todos entrábamos y salíamos en su corazón, y sin llamar a la puerta.
Iñaki Mendieta, durante el rodaje de un programa para televisión, en abril de 1978, con el doctor Fernando Jiménez del Oso (Fotos: J.J.Benítez)
Mendieta, un cura “kui”, con Blanca y Juanjo Benítez.
