En la imagen destacada: Gabo.
Los escritores y periodistas no deberían leer a Gabriel García Márquez.
Me explico.
Tras la lectura de «Cien años de soledad» me sentí anulado. Peor aún: fui incapaz de escribir una sola línea, al menos durante un tiempo.
Y llegué a una conclusión: nadie puede superar una obra como «Cien años…».
No estamos ante una obra humana.
En consecuencia, «Cien años de soledad» debería de estar prohibida.
El resto de la obra de Gabo sí es compatible con la naturaleza humana.
Alguien tendría que indagar, a fondo, en los orígenes del escritor colombiano…