Fuente: Rosa Sánchez de la Vega – elespanol.com 26/XII/2023.
El experto en ufología publica un nuevo y controvertido libro llamado ‘Las guerras de Yavé’.
El periodista y escritor J.J. Benítez lleva más de 50 años viajando, investigando y escribiendo sobre ufología. Coincidiendo con la Navidad trae de la mano su última publicación ‘Las guerras de Yavé’ (Planeta), cuyo propósito es romper con las verdades universales sobre la idea de Dios. Además, plantea una condena radical y clara de lo que es el Estado judío.
Su saga ‘Caballo de Troya’ ya fue suficientemente polémica, pero reconoce que éste es el libro «más peligroso» que ha escrito hasta ahora. Un ensayo en el que habla de extraterrestres, carros de fuego y muchos asesinatos. Según Benítez, hubo un Dios al que se le llamó Elohim, que fue decisivo a la hora de crear el ser humano.
Pregunta- ¿Quién era o quiénes eran los Elohim?
Respuesta- Después de muchos años de investigación, de estudio, y sobre todo de un estudio comparativo del Antiguo Testamento con el fenómeno ovni actual, entiendo que lo que la Biblia propone como Yavé o Dios es falso. ¿Por qué? Pues porque los carros de fuego, las columnas de humo, las columnas de luz que acompañaban a ese pueblo durante la travesía por el Sinaí no tienen nada que ver con la idea que tenemos de Dios o del Padre Azul. Los Elohim serían una civilización o varias civilizaciones con un objetivo y un proyecto. Y para llevar a cabo ese proyecto pues hicieron lo que hicieron.
P.- ¿Cuál era ese objetivo y ese proyecto? ¿Criar a un ser mucho más inteligente?
R.- Es una hipótesis de trabajo, eso tendríamos que preguntárselo a ellos. Lo que se deduce de todo esto es que ellos tenían un largo plazo. Ten en cuenta que estamos hablando de Moisés y de esto hace unos 3.300 años. Jesús nace mucho después y probablemente ese era el objetivo: preparar una identidad nacional.
P.- El Yavé de la Biblia no es el que nos han contado, sino un Yavé xenófobo, machista, inmisericorde, esclavista, tránsfobo, cínico… Un criminal que causa la muerte de miles de personas.
R.- Más de un millón, según mis cuentas, con lo cual es una idea totalmente opuesta a la que nos han contado siempre. La idea que tradicionalmente se ha difundido de ese dios con minúscula está equivocada, porque yo no concibo al padre azul o al buen dios como un señor que autoriza participar en la matanza de millones de personas, niños incluidos. Matar a los primogénitos de los egipcios, cuando Moisés saca a aquella gente, a los supuestos judíos de Egipto, pues no es propio de un buen dios, es propio de un sádico o de un criminal. Es uno de los problemas más graves que estamos padeciendo todavía. Creo que esa idea de Yavé alimentada por las religiones, tanto la judía como la cristiana y los protestantes también, es completamente falsa, un fraude.
P.- La situación que se está viviendo en Israel y Palestina…
R.- Los judíos también mataron, los judíos mataron a mucha gente desde el principio. Suponiendo que tenían una tecnología tan avanzada que eran capaces de volar o de sacar agua de las piedras, pues no me extrañaría nada que estuvieran matando a los legítimos propietarios de aquellas ciudades. Y eso luego se ha confundido con el temor a Dios. Eso es lo que dice la Biblia, pero eso está equivocado. Es decir, ese Dios no era Dios con mayúscula. Nos lo han vendido mal. Y, por supuesto, a lo largo de esa campaña de siglos para quedarse con las tierras de Canaán. Los judíos siguieron matando en nombre de Yavé, si alguien le molestaba, si alguien le estorbaba.
P.- ¿Es ésta la situación que tenemos en Gaza?
R.- La situación actual en la guerra que hay en Gaza y que ha habido en otros momentos de la historia reciente tiene su origen precisamente en lo que estamos hablando. Es decir, que los judíos no tienen razón. Los palestinos son los dueños de esa tierra desde siempre, por lo menos desde hace 3.300 años y los judíos la han usurpado, se han quedado con el territorio y el terrorismo. Gobiernan y esclavizan a mucha gente con las armas, el problema está mal enfocado. En el año 47 los ingleses dieron la bendición al Estado judío cometiendo un nuevo error, muy propio de los británicos. La gente debería leer ‘Las guerras de Yavé’, aunque solo fuera para saber cuál es el origen de la guerra que estamos sufriendo en estos momentos.
P.- Enfrentarse a millones de creyentes de las religiones judías, cristianas, protestantes y musulmanas, hace de la publicación de este libro quizás el más peligroso que hayas escrito…
R.- Sí. Creo que sí, porque mira, ‘Los caballos de Troya’ causaron mucho espanto a mucha gente muy fanática y con mucha tradición religiosa, etc. Pero bueno, quedó ahí, son interpretaciones. Pero es que en ‘Las guerras de Yavé’ hay una condena radical y clara de lo que es el Estado judío. Es decir, llegas a la conclusión de que el Estado judío es un fraude desde su origen. Entonces sí es un libro peligroso para mí.
P.- Tenemos la libertad de la palabra.
R.- A los judíos no les importa la libertad de la palabra. Si alguien les molesta, le cortan la cabeza. Repito, yo no estoy de acuerdo con el terrorismo, pero es que si los de Hamás no sé a cuánta gente mataron, pero mil y pico dicen, pues llevamos casi 20.000 muertos en Gaza y no sé cuántos desaparecidos. Entonces es que no hay proporción. Es que son salvajes, fríos, calculadores, por eso son los amos del dinero en el mundo, y eso no es justo.
P.- ¿Y no tiene arreglo?
R.- Probablemente no, yo al menos no veo la solución. Porque el pueblo tiene muchísimo dinero, tiene aliados que por un lado están vendiendo armas a esta gente y por otro están pidiendo un alto al fuego. Pero al final es todo así, es todo mentira, es dinero y poder.
P.- ¿Cómo se puede hacer entender a la Iglesia que hubo astronautas hace millones de años?
R.- Imposible. Es muy difícil. Muy difícil porque no lo acepta. Los judíos no aceptan lo que estamos planteando aquí. Y saben perfectamente mejor que nosotros que tenemos razón, porque conocen su historia o, al menos, deberían conocerla. Eso significa renunciar a su Estado, a sus tierras que no son suyas. A no ser que pase algo todavía peor. Por ejemplo, mira, después de la masacre en Gaza, que no sabemos cuándo va a terminar, alguno de los países cercanos que odian a los judíos desde hace mucho tiempo, podría instalar una bomba atómica en Tel Aviv. Ya con eso tenemos suficiente. Podría significar el inicio de una guerra a todos los niveles entre occidente y oriente, ojalá me equivoque.
P.- Eso sería la máxima expresión del odio.
R.- Sí. Hay que ponerse en el papel, por ejemplo, de Irán o de Irak, o esta gente que ve cómo 20.000 palestinos, mujeres, niños, etcétera, han muerto. Entonces el odio no tiene límites. Es una de las pocas maldades humanas que no conoce, no tiene fronteras.
P.- ¿Hubo un diluvio, pero no universal?
R.- Lo del diluvio es una malformación de lo que pudo ser una verdad parcial. Es decir, que si hubo una inundación o varias inundaciones pudieron ocurrir en una catástrofe pero a nivel local. Eso lo ha descubierto la arqueología. Han visto cómo a 18 metros de profundidad, creo recordar, en un lugar concreto de Mesopotamia aparece una capa de barro de tres metros de altura. ¿Eso qué es o qué significa? Pues el aluvión que arrastra siempre una inundación de grandes proporciones.
Pero de ahí a pensar en un diluvio universal es absurdo. Según la Biblia, las aguas remontaron por encima de las montañas más altas. Si eso hubiera sido verdad, no existirían las razas en América, los pueblos que conocemos en América, ni existirían los marsupiales en Australia. No es cierto, el diluvio es una historia repetida en diferentes culturas. Cuando los judíos empiezan a escribir la Biblia copian del código Hammurabi, copian de los asirios, copian de los egipcios y, bueno, pues luego se ha dicho que sí, que es universal, pero es falso.
P.- La escalera de Jacob. Cielo y tierra, peldaños por los que suben o bajan los ángeles.
R.- Lo que pasó es que aquella gente a la hora de escribir esa historia tiraban de los conceptos que tenían cerca y que podían comprender. Hay casos de gente, de testigos que ven una nave con una escalerilla por la que sube y baja alguien. Pero, claro, hace tantos años si alguien veía un objeto suspendido en el aire con gran luz y una escalera por la que subía y bajaba gente, pues ¿qué podía pensar?
En esa época era muy difícil de demostrar casi nada, por eso los tomaron por dioses. Yo recuerdo una investigación que hice en el Sinaí, y pregunté a los beduinos de la zona y me dijeron que sus antepasados remotos ya hablaban de unos cubos de luz con una especie de ojos que bajaban. Tenían unas patas y de allí salían unos seres muy altos que los tomaron por dioses en la misma época de Moisés. Eso ha permanecido en la historia o la leyenda.
P.- Has hablado de Moisés. ¿Cuál era el poder de su vara?
R.- Bueno, ahí tenemos muchas dudas. Este equipo le pudo dar a Moisés un artefacto que podría ser utilizado como arma, es posible. Mira, hay otro pasaje donde Josué, el sucesor de Moisés, lucha contra una de esas ciudades. Y dice el texto que él sostenía la vara de Moisés, pero que algo pasaba que al cabo de un tiempo le tenían que sujetar los brazos porque no podía sostener la vara. A mí eso me huele muy raro. ¿Podría ser la vara de Moisés un arma? Pues es posible.
P.- Nosotros no somos descendientes de Adán y Eva, lo somos de personas con un nivel mucho más inteligente. Somos mucho más antiguos, sostienes.
R.- Hay mucha gente que cree que Adán y Eva son nuestros primeros padres; a Eva la engañó una serpiente, una manzana y adiós. Eso es todo un cuento chino. La historia fue mucho más hermosa, mucho más bonita, mucho más dramática. Se calcula que hace unos 35.000 años aquí había mucha gente. En el cosmos hay un orden rígido y una de las órdenes que funcionan son lo que se llaman “los adanes y las evas». En momentos muy determinados, para intentar elevar la condición física y la condición mental de las razas, se envía a estos «adanes» y a estas «evas» a esos mundos, con la finalidad de que se mezclen. Primero entre el Adán y la Eva tienen que tener hijos y los hijos se deben mezclar con los naturales, ese es el orden establecido.
Eva cometió el error de acostarse con un humano y tuvo hijos. Lo más asombroso para mí es que Adán cuando se entera del fallo, por amor, no deja a su compañera a su destino, sino que se acuesta con una humana, con una indígena y comete el mismo error. Es decir, la historia es muy diferente.
P.- La investigación no sirve de nada si no se cuenta. Aun así corres este riesgo e imagino que te habrás guardado muchas cosas.
R.- Me he guardado algunas cosas, pero lo más importante está ahí. Y hay un detalle que a mí me asombra, que lógicamente la gente no se da cuenta. Mira, este libro se terminó en diciembre del año 2021. Y se publicó el 18 de octubre de este año. Del 2023, sí. Dos años después de escribirse ‘Las guerras de Yavé’ estalla la guerra entre los judíos y los palestinos. ¿Cómo es posible que esto salga 12 días después del estallido de la guerra? ¿Cómo es posible?
P.- Cuéntamelo tú.
R.- Pues porque está todo perfecto y minuciosamente programado. Si no, sería imposible.