Quiso ser físico nuclear pero se quedó en periodista, afortunadamente para él y para otros muchos, entre los que me cuento. Juan Francisco Sardaña fue mi primer redactor-jefe. No es fácil dibujar a los que se quiere. Sardaña era y es el escepticismo amable, inasequible al desaliento, eso sí, y contagioso. Nadie ha trabajado más que él en el Periodismo (pondría la mano en el fuego). Me enseñó con el ejemplo. Y a pesar de mis torpezas me admitió en su círculo más cercano. Aprendí y disfruté. Fue otro ángel de la guarda, atento y providencial.
1966. Juanjo Benítez (primero por la izquierda) durante una reunión con parte del equipo de “La Verdad”, en Murcia (España). Paco Sardaña pronuncia unas palabras. (Foto: Tomás.)
Juan Francisco Sardaña, primer redactor-jefe de Juanjo Benítez (1966-1968).